miércoles, 30 de enero de 2008

Divertido ejercicio sobre la caricatura.

Hola, amigos. ¿Os gusta el fútbol? ¿Conocéis al seleccionador nacional de fútbol (Luis Aragonés) y a sus jugadores? Os propongo este juego educativo sobre la caricatura y otras figuras retóricas de Lengua y Literatura como la metáfora, la hipérbole, etc... realizado por Manuel Guerrero (profesor de Lengua del IES "Mar de Alborán" de Estepona). En este ejercicio se unen el humor y el deporte con el conocimiento de algunas figuras literarias. Para empezar a jugar pincha en la imagen de abajo:

A propósito, como ya sabéis estamos celebrando el 80 aniversario del nacimiento de la Generación del 27 en este curso 2007/08 y quiero dejar aquí 2 poemas dedicados a 2 porteros de fútbol, uno de Rafael Alberti y otro de Miguel Hernández. Pincha en abrir para verlos.

ABRIR CERRAR


Veremos que poesía y deporte no están tan alejados el uno del otro, de hecho hay grandes poemas sobre el deporte, en concreto hay varios ejemplos en los poemas de la Generación del 27.
El siguiente poema de Alberti, está dedicado al arquero húngaro Franz Platko quien atajando en el partido de Santander contra la Real Sociedad en la final de la Copa de España de 1928 recibe un fuerte golpe en la cabeza. Pese a eso, logra terminar el partido con un importante vendaje y, más aún, con gran altura.

Al gran oso rubio de Hungría

Ni el mar,
Que frente a ti saltaba sin poder defenderte.
Ni la lluvia, ni el viento, que era el que más rugía.
Ni el mar, ni el viento, Platko,
Rubio Platko de sangre,
Guardameta en polvo,
Pararrayos.
No, nadie, nadie, nadie,
Camisetas azules y blancas, sobre el aire.
camisetas reales,
contrarias, contra ti, volando y arrastrándote.
Platko, Platko lejano,
Rubio Platko tronchado,
Tigre ardiente en la hierba de otro país,
¡ Tú, llave, Platko, tú llave rota,
llave áurea caída ante el pórtico áureo!
No, nadie, nadie, nadie,
Nadie se olvida, Platko
Volvió su espalda el cielo.
Camisetas azules y granas flamearon,
apagadas, sin viento
El mar, vueltos los ojos,
se tumbó y nada dijo.
Sangrando en los ojales,
sangrando por ti, Platko,
por tu sangre de Hungría,
sin tu sangre, tu impulso, tu parada, tu salto
temieron las insignias.
No, nadie, Platko, nadie,
nadie se olvida.
Fue la vuelta del mar
Fueron diez rápidas banderas
incendiadas sin freno.
Fue la vuelta del viento.
La vuelta al corazón de la esperanza
Fue tu vuelta.
Azul heroico y grana
mando el aire en las venas
Alas, alas celestes y blancas,
rotas alas, combatidas, sin
plumas, encalaron la hierba.
Y el aire tuvo piernas,
tronco, brazos, cabeza.
!Y todo por ti Platko,
rubio Platko de Hungría!
Y en tu honor, por tu vuelta,
porque volviste el pulso perdido a la pelea,
en el arco contrario al viento abrió una brecha.
Nadie, nadie, se olvida.
El cielo, el mar, la lluvia lo recuerdan.
Las insignias.
Las doradas insignias, flores de los ojales,
cerradas, por ti abiertas.
No nadie, nadie, nadie,
nadie se olvida, Platko.
Ni el final: tu salida,
oso rubio de sangre,
desmayada bandera en hombros por el campo.
!Oh Platko, Platko, Platko
tú tan lejos de Hungría!
¿Que mar hubiera sido capaz de no llorarte?
Nadie, nadie se olvida,
no nadie, nadie, nadie.

Rafael Alberti
Otro poema interesantísimo dedicado a un portero de fútbol fue el que Miguel Hernández dedicó a Lolo, un guardameta de Orihuela. Léelo aquí.


Por cierto, a ver si ganamos de una vez un título con nuestra selección. Podéis dejar vuestros comentarios y sugerencias para que vayamos mejorando. Gracias por vuestra atención.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me consta que más de uno y más de dos se entretienen en los recreos con los juegos de esta entrada, así que a ver si se animan y dejan su comentario. ¿Eh? Gonzalo y compañía...

Club de Lectores IES Andrés Pérez Serrano dijo...

Gracias Rocío por animar a los chicos y chicas a dejar sus comentarios.
Luis sigue en la selección y le ganamos a Francia (cuando no vale de nada). En fin, como dijo aquel portero del Real Madrid: "La vida sigue igual".